“Si los padres no gatearon, los bebés tampoco lo harán”.
“Si lo metes en andadera va a caminar antes”.
“No lo estimules porque lo estás forzando”.
“Si le pones zapatos antes de caminar va a hacerlo mejor”.
“Todos los niños van logrando todo a su tiempo”.
“Si no gatea no hay problema, es normal que algunos niños lo logren y otros no”.
“Igualito a su papá que no habló hasta los 4 años”.
Los mitos son limitantes y la Neurociencia los debate absolutamente. Estudios actuales demuestran que no hay determinismo genético en Neurodesarrollo, la influencia del medio que rodea al niño determina la expresión o no de ciertos genes.
La adquisición de habilidades neuromotoras dependen de la experiencia, de la inducción y estimulación para alcanzarlas y del ambiente que rodea al niño.
El colocar a los bebés en andaderas está prohibido por la Academia Americana de Pediatría por los daños que causan en su sistema locomotor, en articulaciones y desarrollo tónico muscular, además de afectar negativamente el sistema de equilibrio y ser los causantes de terribles accidentes. Su venta está prohibida en más de 10 países del mundo.
Las conexiones neuronales dependen de la estimulación. Si el cerebro recibe un estímulo a través de cualquier vía sensitiva, este hace las conexiones en base a la calidad de ese estímulo y, por lo tanto, sus respuestas serán de menor o mayor calidad de acuerdo con el estímulo que ocasionó el impulso nervioso.
Los estudios demuestran que estar descalzos favorece el desplazamiento y el soporte adecuado para adquirir la marcha, además se evitan lesiones y le brinda un mayor equilibrio.
Hay indicadores del desarrollo que el niño debe cumplir en cada área y que informa cómo se están dando los procesos; un retraso en la aparición de adquisiciones del desarrollo global o de un área específica, para la edad del niño, nos puede alertar sobre algún problema que pueda estar presentando en su sistema nervioso central.
Un 16 % de niños presenta algún trastorno del neurodesarrollo (sin incluir los trastornos de aprendizaje). Solo el 40% se detecta antes de escolarizar.
Expresiones como las descritas al inicio de este artículo, solo arriesgan la salud integral del niño, exponiéndolo a que solape o esconda un problema del desarrollo que con el transcurrir del tiempo se asevera y que al entrar en edad escolar le complica su desenvolvimiento, con las tristes consecuencias a nivel emocional.
No esperes, no excuses, luego ya no habrá tiempo y tu hijx asumirá las consecuencias de tu decisión de no actuar.
No olvides que en mi blog tengo mucha información para ayudarte a potenciar el desarrollo de tu bebé. También puedes agendar una cita virtual de neurodesarrollo , o adquirir alguno de mis cursos 100% prácticos y en formato digital.